Ojo con la información que entrega por teléfono pues puede terminar pagando deudas que no suyas
Los delitos informáticos son un tema muy delicado en el país, en parte por la falta de conocimiento que los colombianos aún tienen sobre el verdadero valor de la información personal.
Es común recibir llamadas o incluso correos electrónicos en que se solicitan datos sobre el tipo de productos bancarios que se manejan, direcciones e incluso fechas de expedición de las cédulas.
Sandra Collazos es una ibaguereña que viene sufriendo a manos de personas inescrupulosas que al parecer clonaron su tarjeta de crédito.
“Me llamaron del banco y me dijeron que había salido beneficiada con unas tarjetas de crédito, ellas llegaron a mi casa selladas y quien me las entregó me indicó que si no desprendía la tirilla que tapaba los números en alto relieve no estarían activas”.
La señora relató que en días posteriores la llamaron a informarle que se había ganados un viaje y le solicitaron varios datos personas, luego la llamaron del banco a decirle que se había ganado unos puntos y que estaban corroborando datos, sin embargo días después se dio cuenta que entre datos muy valiosos a terceros.
“Un día preste una de las tarjetas y en lugar de sacar 2 millones sacaron 2 millones 400 mil pesos pero nunca me llegó un mensaje, a los 8 días canceló la deuda y se suponía que la tarjeta quedó inhabilitada, sin embargo esta semana me llamaron a decirme que como quería las cuotas de unas compras que había hecho en Bogotá, pero yo nunca he ido a comprar nada”.
Sandra Collazos llamó a la empresa donde supuestamente compró los viajes que le cargaron a su tarjeta, una deuda de casi 900 mil pesos pues el banco le indicó que no le podía responder porque ya había pasado más de un mes.