El gerente de la Federación Nacional de Arroceros (Fedearroz), Rafael Hernández, y el alcalde del municipio de El Espinal, Juan Carlos Tamayo, hablaron esta mañana en Econoticias sobre la puesta en funcionamiento de la nueva planta de secamiento, almacenamiento y trilla.

Inicialmente, Hernández dijo que a raíz del compromiso establecido con los productores del país y con base en los fondos generados por utilidades de subastas en los Estados Unidos, se tomó la decisión ejecutar recursos en obras de Casanare, Meta, Cesar y el Tolima.

En la tierra de la tambora, por ejemplo, fueron invertidos $45 mil millones que sirven, entre otras cosas, para garantizar el beneficio de los productores con posibilidad de empaquetamiento, y así ha sucedido en las demás regiones que han sido epicentro de acciones de infraestructura.

Por su parte, el alcalde Tamayo destacó que precisamente el arroz representa la principal actividad económica de El Espinal, por lo cual adquiere mayor relevancia la inversión realizada por la Federación y un impacto significativo en la economía de las familias.

Salir al mercado con productos propios se convierte en una alternativa importante, es por eso que Fedearroz no le cierra las puertas a aquellos productores que están interesados en ofertas una marca propia con valores agregados que potencialicen la compra de su producto.

"Se puso el dedo en la llaga en el tema del monopolio", dijo Tamayo ante la intervención de la entidad nacional, e insistió en que la vocación agrícola del municipio ha impedido que el impacto de la pandemia sea superlativo toda vez que ese sector ha logrado mantenerse vigente.

Por su parte, Rafael Hernández afirmó: "Nosotros generemos 500 o más empleos directos en El Espinal, hemos querido contribuir porque es una zona arrocera y agrícola muy importane, es uno de los centros de la molinería en Colombia".

El 80% del arroz de Colombia se produce en Meta, Casanare, Tolima y Huila. Sin embargo, es la producción del centro del país la que sigue ostentando la más alta calidad.

En relación con Hidrototare, Hernández dijo que se trataba de "un proyecto que le causaba serios perjuicios a la agricultura", y agregó que en términos ambientales también generada un impacto negativo en los municipios aledaños.