La Unidad Médico Quirúrgica de Cirugía Plástica Ambulatoria ya cuenta con 18 años prestando sus servicios profesionales en la ciudad de Ibagué y mediante la cual ya ha logrado realizar intervenciones a pacientes de diferentes países quienes se ven atraídos y sienten la confianza para ser sometidos a un procedimiento quirúrgico obteniendo resultados con calidad. 

Durante los años de experiencia que cuenta el Doctor Martínez, el caso del paciente Ángel es calificado como el más icónico no solo para su carrera profesional, si no que se ha convertido en un caso de gran importancia en el Tolima por las características que representa y son evidenciadas en un antes y después obteniendo excelentes resultados tanto físicos como en el mejoramiento de la calidad de vida del paciente. 

“Llegué al tratamiento por un concurso de ese tiempo para personas gordas, una campaña que dirigía la Alcaldía, entonces tomó la decisión de participar en el concurso y me llevo el primer puesto, es allí donde conozco al Doctor Cesar Martínez  quien se había vinculado con un premio, el cual tuve el honor de ganármelo y a partir de enero de 2005 empezamos un tratamiento extenso y muy completo que duro desde enero del 2005 y culminamos el 30 de marzo de 2006 en la cirugía”, Ángel Guzmán Sánchez.

La inquietud que se formula particularmente en este paciente que para la fecha contaba con dicha comorbilidad es conocer ¿cómo logró perder casi 100 kg con un tratamiento y una cirugía? tratamiento que contó con varios profesionales liderados por el cirujano Cesar Martínez.

“Es un proceso que contó con la participación, activa, decidida, y disciplinada del paciente, empezamos con 209 kg y culminamos con 111 kg que fue una meta que le pusimos, yo le dije a don Ángel ‘yo lo opero’, pero bajamos a 100 kg, casi una meta imposible; nosotros tenemos muchos tratamientos en los cuales a los pacientes les decimos baje 8 kg y se les hace difícil. Don ángel empezó de una manera bien dirigida nutricionalmente adecuada, nunca tuvo anemia y logro bajar de 8 a 10 kg mensuales, es más tuvimos  ocasiones que logró bajar 13 kg mensuales”, así lo menciono el Dr. Martínez. 

Sin duda se trata de una cirugía supremamente difícil, tal como lo califica el profesional de la salud quien además considera este procedimiento muy riguroso al tratarse de un paciente con obesidad mórbida, es de aclarar que una persona que se encuentra en una situación similar a la de Ángel no se puede operar de manera inmediata, ya que se requiere un excelente condicionamiento físico para evitar que la cirugía no sea riesgosa, es decir es imposible sacar los 100 kg de grasa en una cirugía por normas de seguridad.

“Todo fue bien planificado, pues se trataba de una cirugía robusta, iniciamos realizando unas marcaciones de la zona pectoral, cuello y abdomen, para así analizar las áreas a sacar, entramos dos cirujanos, yo como cirujano plástico y otro general, el anestesiólogo, cuatro enfermeras y dos instrumentadoras, todos logramos sacar la cirugía en menos de tres horas; cuando sacamos los colgajos de piel los pesamos y evidenciamos un peso total de 6 kg”.

“Mi vida antes de la cirugía, era sobrevivir, dormía sentado, el tema de transporte se me dificultaba, llegaba la navidad y no encontraba ropa para mí, estuve en unas bulimias ansiosas y depresivas referente a una fuerte adicción a los alimentos, así como alguien se vuelve adicto a las drogas, para mí la comida fue mi adicción”, Señaló Ángel. 

Como parte de la preparación antes del procedimiento, el paciente debió consagrarse a estrictas dietas durante 15 meses acompañadas de largas caminatas, al momento de la cirugía Ángel tenía 45 años y como el mismo lo relata era gordo desde los 28, luego fue ganando peso logrando un ascenso de 200 kg en el año 2.000.

Uno de los momentos qué más recuerda el paciente es que muchos lo señalaron en ese momento como el ‘hazme reír’, pero con el paso del tiempo obtuvo el logro esperado ya que afirma que el ser un hombre dicharachero le ayudó a conservar la tranquilidad, es de destacar que actualmente la cirugía que se le practicó al paciente oscila sobre los 40 millones de pesos.

Finalmente, el Doctor Cesar Edwin Martínez, dejó un mensaje claro para las personas que padecen de esta misma condición ya que una pésima alimentación aliada a la inactividad física, puede traer graves consecuencias y más en esta época de pandemia.  

“La obesidad es una pandemia, nosotros tenemos una dieta muy inadecuada donde no falta el arroz, la papa, el pan, los dulces, las galletas y de remate el postrecito, nos alimentamos inadecuadamente, la obesidad tiene serias consecuencias como la hipertensión, la diabetes, problemas cardiovasculares, articulares”.

Sin duda para Ángel Guzmán Sánchez un hombre que a la fecha tiene 60 años se volvería a operar con el Dr. Cesar Edwin Martínez, ya que como lo menciona confía en él, a ojo cerrado.  

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