El giro de dinero de los colombianos migrantes se realiza de manera constante desde EEUU; España, Europa y Canadá principalmente. Tan solo en el mes de agosto los giros sumaron US$887 millones y en octubre US$885 millones, lo que llevó las remesas a octubre a US$8,290 millones, informó el Banco de la República.

La cifra muestra la gran posibilidad que tienen las empresas solidarias y cooperativas para ser receptoras de los giros, pero sobre todo ampliar su portafolio de servicios para la constitución de inversiones o la compra de activos de largo plazo, como la vivienda.

Actualmente los mayores usos de estos recursos se destinan para el consumo o como salvavidas para las familias de los migrantes, recalca un estudio de Dilip Ratha economista principal en el Banco Mundial.

Las remesas podrían seguir creciendo y en el caso Colombiano cerrar el año por encima de los US$10.202 millones de dólares según estimativos del Banco Interamericano de Desarrollo.

Las remesas generan costos financieros que van desde el tres, al ocho por ciento dependiendo la región que reciba los recursos. Aunque en regiones de África el costo financiero puede llegar a un 35 por ciento según estudios del Banco Mundial.