En los últimos días, los habitantes del barrio Entre Ríos han venido enfrentando una problemática que afecta directamente su calidad de vida: la falta de presión en el suministro de agua. Los propietarios de las viviendas han denunciado que el agua que llega a sus casas no tiene la presión suficiente, lo que ha generado un gran malestar y descontento en la comunidad. 
 

Según los residentes, este inconveniente ha afectado diversas actividades cotidianas, como el aseo personal, la limpieza del hogar y la preparación de alimentos. Varias personas han expresado su frustración, señalando que incluso se han visto en la necesidad de buscar soluciones improvisadas, como el almacenamiento de agua en recipientes grandes, para poder realizar tareas esenciales. El malestar ha crecido con el paso de los días, ya que la situación persiste y parece no encontrar una pronta solución.

Los afectados han intentado comunicarse en diversas ocasiones con el Ibal, con el objetivo de que se tomen medidas para resolver la situación. Sin embargo, aseguran que no han recibido respuesta por parte de la entidad. La falta de atención y la incertidumbre sobre la duración de este problema han incrementado la preocupación de los vecinos, quienes temen que esta situación continúe afectando su día a día sin una pronta solución. 

El temor a que este inconveniente se prolongue durante más tiempo ha comenzado a generar inquietud entre los residentes, quienes exigen que el Ibal tome cartas en el asunto para evitar que la situación empeore.

La comunidad de Entre Ríos pide que se realicen las reparaciones necesarias y se implemente una solución definitiva a este problema que, según ellos, lleva ya varios días sin respuesta. Mientras tanto, los vecinos esperan que las autoridades correspondientes tomen las medidas necesarias para garantizar el derecho al agua potable en condiciones óptimas para todos.