Ladrones azotan el sector de Cerro Gordo con el robo de medidores del agua
Al parecer, se podría tratar de una banda de pillos que actúan haciéndose pasar como recicladores o habitantes de la calle pero que mantienen al acecho y cobijados por las sombras de las noches, llegan hasta las cajas que se ubican en los andenes de las viviendas y en una maniobra que no tarda más de 5 minutos, lo arrancan y huyen del lugar dejando el daño y el consabido reguero de agua del cual sólo se percatan los moradores al amanecer sin el vital líquido y verificar lo que ha sucedido.
La situación la ha puesto en conocimiento el señor Humberley Ospina, haciendo el llamado a la Administración Municipal y a las autoridades para que se investigue y se haga un seguimiento a la situación puesto que además de la afectación que esto conlleva para los propietarios o habitantes de las viviendas, también causa un impacto económico fuerte al tener que proceder a la compra e instalación de este elemento.
“Es una problemática que se nos viene presentando desde la semana pasada, aproximadamente, hace unos diez días que la comunidad se ha venido acercando a expresarnos que ya en 16 viviendas se han hurtado los medidores del agua y generando una grave situación porque los que no tienen como mandar a arreglar el daño de manera inmediata, se quedan sin servicio y otros han tenido que acudir a realizar conexiones fraudulentas o temporales puesto que no están bajo la normatividad o supervisión del IBAL y además que tienen que ir a comprar el artefacto, llevarlo a la empresa para que lo certifiquen y demás trámites que son demorados, tienen que incurrir en un gasto que está por alrededor de 190 mil pesos”, expresó don Humberley, habitante y líder de Cerro Gordo.
Además manifestó que la mayoría de inmuebles afectados pertenecen a familias de escasos recursos que por lo general no cuentan con el dinero para incurrir en esos gastos mientras que quienes los hurtan van y los venden por 3 mil o 5 mil pesos que es lo que les dan donde los compran de manera fraudulenta generando grave afectación a las viviendas y a la comunidad.
“Cada noche están desapareciendo dos o tres contadores que se roban, el problema es reiterado y hemos estado pendientes a ver si logramos identificar de quién o quiénes se trata, hemos comunicado a la Policía pero no ha sido posible porque nos dicen que cuando escuchan que se acercan las motos de los agentes, se desaparecen, se pierden y mientras tanto el problema se va acrecentando entre la comunidad”, agregó.
Dijo que aprovechan la soledad de las noches y en silencio, abren las cajas de los medidores que con un destornillador o una palanca se puede abrir porque los funcionarios del IBAL están tomando las lecturas permanentemente, entonces arrancan prácticamente el medidor rompiendo las tuberías de donde se conectan y se van dejando el reguero, cuando las personas se levantan, encuentran que no tienen agua y afuera hay un desperdicio por el robo que les hicieron.
Daño en el alcantarillado
Afirmó don Humberley que adicional a lo anterior, en el sector de Cerro Gordo hay una delicada situación con el daño o taponamiento de una tubería del alcantarillado sobre la cual se ha oficiado y la empresa IBAL tiene conocimiento pero en lugar de haberse brindado una solución, el problema ha empeorado.
“Es un tema de pleno conocimiento de los señores del IBAL e incluso hubo una tutela y una acción de desacato, fueron sancionados pero ni eso ha servido para que lo solucionen, es sobre una pendiente donde la alcantarilla se tapó, hay doce casas que depositan sus aguas residuales, al taparse se aflojó el terreno y daño el concreto, se generó un hueco de unos 4 metros de diámetro con malos olores zancudos y demás plagas, en vista de eso un residente taponó con escombros y lo rellenó con concreto y el agua está vertiendo subterráneamente y cayendo al tanque del IBAL en Cerro Gordo que suministra el líquido para muchísimos barrios, o sea que esas aguas negras se las están vertiendo por encima al agua potable que consumen muchas familias ibaguereñas”, concluyó el señor Ospina.
Escuche a Humberley Ospina: