Un caos vehicular se vive a diario en la carrera sexta entre la calle 42 y 39 producto del mal estado en que se encuentra la malla vial y los elementos de regulación de movilidad como reductores, estoperoles y bolardos ubicados en este tramo.

Estos elementos que fueron instalados durante la administración del ex alcalde de Ibagué, Guillermo Alfonso Jaramillo, aparentemente tenían como objetivo mejorar el tráfico hoy en día se han convertido en una problemática, según habitantes del sector estos dispositivos ya se encuentran obsoletos y su deplorable estado pone el riesgo a los conductores que a diario pasan por allí, por ejemplo, en lo que corresponde a los estoperoles muchos de ellos se encuentran rotos y con los tornillos a plena vista, una situación que ha provocado que los vehículos sufran pinchazos cuando pasan sobre ellos. En lo que corresponde a los estoperoles en su mayoría se encuentran deformados a causa de los vehículos de servicio público y de carga pesada que los aplastan por el reducido espacio en el carril, finalmente, los reductores de velocidad se encuentran en obsoleta condición, pues debido al desgaste en lo más de cuatro años de su instalación no han sido intervenidos.

Julio Triviño, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio el Restrepo declaró que todos estos elementos cumplieron su función hace más de dos años y que ya es necesaria la intervención por parte de las autoridades para volver a reducir los altos índices de accidentalidad que se vienen presentando en la zona. Sobre esta situación se empieza a abrir el debate sobre si es necesario que en este importante corredor vial de la ciudad se modifique su orientación de doble sentido para dejarlo en sólo uno.

De momento se supo por parte de Julio Triviño que esa posibilidad ya se estaría planteando desde la actual administración de Andrés Hurtado y que es muy probable que en algún momento funcionarios de la secretaría de movilidad empiecen a adelantar acciones en el sector.