"Les cobraron casi $800 mil por un pedazo de andén y ya": presidente del Concejo
No se detiene la polémica en torno a los vendedores que arrendaron espacio público sobre la carrera 5a durante el Festival Folclórico Colombiano. Muchos argumentan pérdidas millonarias por presunto incumplimiento de la Alcaldía de Ibagué y aparente carencia de control que favoreció la competencia desleal.
Lo que prometía ser un escenario boyante para un grupo significativo de vendedores de la ciudad, terminó convirtiéndose en un 'hueco' financiero que va en contravía de la reactivación económica, no solo por el complejo panorama de ventas, sino también por los recursos que tuvieron que consignar para gozar de un punto fijo.
Reacciones en el Concejo
Eduard Toro, presidente del Concejo Municipal de Ibagué, cuestionó el papel desempeñado por la Secretaría de Gobierno y su Dirección de Espacio Público, y recalcó que las autoridades no brindaron garantías para evitar que las ventas ambulantes afectaran a quienes operaban en la formalidad.
"Los estacionarios quebraron, no se les dieron las garantías y no hicieron el control que debían hacer (...) después de dos años de pandemia todo el mundo quería aprovechar el momento. A esas personas se les cobró casi 800 mil pesos para un pedazo de andén y ya", sostuvo el cabildante del Centro Democrático.
¿A la deriva?
Según Toro, los recursos consignados ni siquiera involucraron el suministro de carpas o la prestación de servicios de vigilancia. "Si no se les van a dar esas garantías, para qué se les cobra", puntualizó.
