En la entrada de Villa Ricaurte, en la comuna 12 de Ibagué, un establecimiento comercial se ha convertido en motivo de constante preocupación para la comunidad debido a los recurrentes escándalos y peleas que tienen lugar en el sitio, sin que hasta ahora se hayan aplicado sanciones por parte de las autoridades.

Los residentes de la zona denuncian que esta problemática no es nueva y que los disturbios en el establecimiento son frecuentes. Uno de los residentes comentó que en los últimos dos meses se han registrado al menos cuatro cierres temporales del local por diversas infracciones, como exceso de ruido y situaciones de violencia.

"Cada ocho días hay problemas allí, hace veinte días cogieron cuatro personas porque se pasaron de la hora, golpearon a un policía, escupieron la cara a otro, se llevaron cuatro capturados, ese día sí lo sellaron por cuatro días. Y hace mese y medio antes lo habían sellado también, sacaron un muchacho esposado y dos menores de edad", relató uno de los vecinos.

La situación se agrava debido a que, según testimonios de los residentes, a pesar de los múltiples llamados de la comunidad y las denuncias realizadas, las autoridades no han tomado medidas contundentes para resolver este problema. Se ha informado que, en varias ocasiones, se ha llamado a la Policía para intervenir en los incidentes, pero las respuestas han sido insuficientes.

La comunidad también señala que el impacto de los disturbios y el ruido generado por el establecimiento ha afectado directamente a los vecinos, perturbando su tranquilidad y calidad de vida. Además, han expresado temores de represalias por parte de los propietarios del local.

Ante esta problemática, los residentes hacen un llamado a las autoridades locales para que tomen acciones concretas y efectivas para poner fin a los disturbios y sancionar a los responsables. La comunidad exige que se apliquen las medidas necesarias para garantizar la convivencia pacífica en la zona y preservar la seguridad y el bienestar de todos los habitantes.