Debate sobre el Panóptico de Ibagué
A partir de las 7: 30 a.m. de hoy inició el debate al tema del Panóptico en la ciudad de Ibagué citado por el Concejal Pedro Antonio Mora Quintero. Se espera que el Secretario administrativo de la Alcaldía Municipal, el señor Eugenio Villanueva Guarnizo; la de Cultura, Turismo y Comercio, Ángela Bibiana Gómez; y el de Infraestructura, Jaime Vélez; cumplan el deber que les corresponde y asistan a este debate.
Al respecto, el concejal Héctor Vladimir Espín habló para ECONOTICIAS sobre la apreciación que tiene del proyecto que calificó de ‘Elefante Blanco’ y aseguró no ser opositor del gobierno municipal sino que por el contrario apoya los proyectos que apunten al desarrollo de Ibagué y especialmente los turísticos.
Aunque ya han sido entregados algunos trabajos y obras a la administración municipal, ahora encargada de intervenir directamente en este proyecto, bien es sabido que el estado del panóptico no es el mejor. “Estamos criando culebras y zancudos en uno de los lugares insignia del eje cultural de Ibagué que aun no se ha podido consolidar” afirmó Espín.
El concejal manifestó que este proyecto ejecutado desde el año 2003 se ha visto mediado por trabas políticas que han impedido que se lleve a su buen término. Según Espín, el Panóptico es producto de un convenio entre la Gobernación departamental y la Alcaldía municipal, donde el primero se comprometió a otorgar 800 millones de pesos que al parecer aun no se han desembolsado.
“No se ha ejecutado correctamente por las diferencias, los odios y egos tanto del Alcalde, Jesús María Botero y el Gobernador, Óscar Barreto” sostuvo el honorable e inconforme Concejal, quien sugirió que mientras el municipio apoyaba, desde la gobernación se dilataban los procesos, por lo que invitó a los mandatarios a superar sus diferencias y a darle prioridad a los proyectos que propenden por el progreso del municipio, el departamento y el país entero.
Aun no hay claridad frente a la determinación del uso que se le dará al Panóptico, si se constituirá en un museo, un centro cultural o un epicentro de reconocimiento a los derechos humanos. Pero se espera que con el debate que se está dando, se defina el rumbo de este escenario y se constituya en el primer paso para ‘desempolvar’ esta obra y continuar con la tarea de completar el eje cultural.