En la mañana de hoy, trabajadores de una IPS ubicada en la carrera 4G #34-66, en el barrio Cádiz de Ibagué, se reunieron frente a las instalaciones para exigir el pago de sus salarios correspondientes a los meses de julio y agosto. Según los manifestantes, la situación se ha prolongado sin una respuesta clara por parte de la administración, a pesar de que la institución habría recibido 117 millones de pesos el pasado 8 de agosto para el pago de sus empleados.

“Nos ignoran, se burlan de nosotros. Hemos tratado de hablar con los administradores, pero solo nos dicen que están en proceso de recaudo”, afirmó una de las trabajadoras afectadas, quien asegura que la coordinadora y otros responsables de la IPS no han dado explicaciones sobre la demora en los pagos. Además, varios de los empleados denunciaron que han tenido que recurrir a la policía para exigir sus derechos, lo que agrava la situación.

La protesta, que ha sido pacífica, también se centró en las condiciones laborales precarias a las que se enfrentan. Muchos de los empleados, contratados bajo la modalidad de OPS (Orden de Prestación de Servicios), aseguran trabajar largas jornadas sin recibir un salario mínimo justo ni prestaciones de ley. “Tenemos hijos, pagamos servicios y esta es la hora en la que no tenemos ni para el transporte”, expresó una auxiliar de enfermería durante la manifestación.

Además de los reclamos salariales, los empleados han denunciado un grave abandono de los pacientes. Según los testimonios, hay más de 40 pacientes que no están recibiendo la atención adecuada debido a la falta de personal, ya que muchos trabajadores han dejado de prestar sus servicios por la falta de pago. “Se está jugando con la vida de personas vulnerables, y la administración no muestra interés en solucionar el problema”, señaló Gilberto Mejía, presidente de la Veeduría Nacional por una Salud Digna.

La situación ha generado preocupación entre las autoridades locales y departamentales. Los manifestantes hicieron un llamado urgente a la Secretaría de Salud del Tolima y al Gobierno Nacional para intervenir en el conflicto y garantizar el pago de sus salarios, así como la adecuada atención de los pacientes que dependen de la IPS.

Hasta el cierre de esta edición, no se había recibido una respuesta oficial por parte de los representantes de la IPS, mientras los empleados manifestaron su intención de continuar con las protestas hasta que se cumplan sus demandas.