En un emotivo acto de solidaridad, el intendente de la Policía Nacional, Orlando Ospina, ofreció su ayuda a Lucero Martínez, una adulta mayor de 62 años que trabaja como recicladora en el barrio La Gaviota de Ibagué. La señora Lucero, quien recorre las calles a diario con su carrito lleno de reciclaje, enfrentaba las dificultades de subir una empinada calle cuando el intendente Ospina, al ver su situación, decidió intervenir y darle una mano. Este gesto no solo refleja el compromiso de la Policía Nacional con la seguridad, sino también con el bienestar de los ciudadanos más vulnerables de la comunidad.

Lucero Martínez, quien ha dedicado gran parte de su vida al reciclaje para ganarse el sustento, agradeció conmovida el apoyo recibido por parte del oficial. "Es difícil a mi edad, pero toca seguir adelante", expresó la señora Lucero, visiblemente emocionada por la ayuda brindada. La ardua tarea que realiza a diario, recogiendo materiales reciclables por las calles de Ibagué, se ha convertido en su forma de vida, pese a los desafíos físicos y económicos que enfrenta.

Este tipo de gestos resalta el espíritu de servicio y empatía que caracteriza a los miembros de la Policía Nacional, quienes no solo están al frente de la seguridad, sino también listos para tender la mano a quienes más lo necesitan. El acompañamiento del intendente Ospina a la señora Lucero hasta su vivienda demostró cómo, con pequeñas acciones, se puede generar un impacto significativo en la vida de una persona. Este acto no pasó desapercibido entre los vecinos, quienes elogiaron la disposición del oficial.

La Policía Nacional, a través de acciones como esta, reafirma su compromiso con la comunidad, destacando que su labor no se limita a la vigilancia y el control, sino que también busca promover el bienestar social y la cohesión entre los ciudadanos. El apoyo a personas como Lucero, que enfrentan difíciles circunstancias, es fundamental para construir una sociedad más justa y solidaria. Estos actos de generosidad invitan también a los ibaguereños a sumarse a esta cadena de solidaridad.

Finalmente, este acto es un recordatorio de que la solidaridad y el servicio comunitario pueden surgir en cualquier momento y lugar. Lucero Martínez seguirá con su trabajo de reciclaje, pero lo hará con la certeza de que no está sola y de que, como en el caso del intendente Ospina, siempre habrá alguien dispuesto a ayudarla en su camino.