Caso Stiven Baquero: dudas y denuncias sobre su muerte en custodia policial
El fallecimiento de Stiven Baquero, un joven de 20 años detenido el pasado 6 de octubre en la Estación de Policía Norte de Ibagué, ha desatado una ola de indignación y cuestionamientos sobre las circunstancias que rodearon su deceso. Lo que comenzó como una riña en un bar del barrio El Salado terminó en una tragedia que ahora concentra la atención de los medios, las autoridades y las organizaciones de derechos humanos.
La familia de Stiven Baquero ha señalado irregularidades desde el momento de su detención. Según las primeras versiones, el joven fue arrestado por la Policía tras participar en una riña en la que, supuestamente, portaba un arma blanca. Sin embargo, horas después, las autoridades informaron que Baquero había fallecido bajo custodia, atribuyendo su muerte a un presunto ahorcamiento. Esta explicación ha generado desconfianza entre sus allegados, quienes exigen claridad y una investigación exhaustiva.
"No puedo creer que traten así el cuerpo de mi hijo. Nos tuvieron toda la noche esperando respuestas y al final nada. Es muy doloroso saber que lo tienen de un lado para otro y que no le dan el trato digno que merece", expresó entre lágrimas su madre, quien también criticó la demora en el traslado del cuerpo a Medicina Legal.
El abogado penalista David Palacio ha denunciado diversas inconsistencias tanto en el manejo del cuerpo de Baquero como en los procedimientos seguidos por la Policía. Según Palacio, el cuerpo del joven presentaba golpes visibles en el rostro y brazos vendados, signos que no concuerdan con las circunstancias reportadas inicialmente. "No hay pena de muerte en Colombia para que una persona entre viva a una Estación de Policía y salga muerta. Aquí se están violando derechos fundamentales", afirmó.
Palacio también destacó la demora de más de cuatro horas por parte del CTI (Cuerpo Técnico de Investigación) para realizar el levantamiento del cuerpo, así como la retención del cadáver en un lugar no identificado durante la noche. Estas acciones, aseguró, incrementan las sospechas sobre posibles irregularidades. Además, la familia no pudo ver el cuerpo antes de que fuera trasladado a una funeraria, y temen que se les niegue despedirse de Stiven bajo argumentos relacionados con higiene o preservación del cadáver.
La Procuraduría General de la Nación anunció que asumirá la supervigilancia de la investigación, dado que los hechos podrían implicar una vulneración de derechos humanos. Por otro lado, la Fiscalía Militar y Policial decidió remitir el caso a la Justicia Ordinaria, reconociendo la gravedad de lo sucedido y la necesidad de una investigación imparcial y transparente.
El concejal Andrés Zambrano también se pronunció al respecto, exigiendo respuestas inmediatas y anunciando su intención de abrir un debate en el Concejo de Ibagué sobre el actuar de la Policía. "Es inconcebible que quienes están llamados a proteger la vida sean señalados por omisiones que pueden costar vidas humanas", enfatizó.
En medio de las investigaciones, se espera con urgencia el dictamen oficial de Medicina Legal, que será crucial para esclarecer las causas del fallecimiento de Stiven Baquero. Este informe podría confirmar si hubo fallas en los protocolos de custodia policial o si el joven fue víctima de abusos durante su detención. Mientras tanto, la familia del joven continúa exigiendo justicia y respuestas claras que permitan entender lo sucedido.
Econoticias seguirá informando sobre el desarrollo de este caso, que ha dejado profundas heridas en la familia Baquero y ha generado una amplia indignación en la comunidad local.
