"Somos pusilánimes por darle el voto a los tramposos que aspiran a los altos cargos" expresidente de las altas cortes
Con el objetivo de exaltar los 40 años de la Unibagué y los 25 de la facultad de derecho, se realizó ayer una conferencia para hablar de 'ética pública', contextualizada en los diferentes estadios de la sociedad colombiana.
Fue así que la conferencia estuvo a cargo del doctor Nilson Pinilla Pinilla, expresidente de la Corte Suprema de Justicia y de la Corte Constitucional, quien entregó sus posturas sobre este tema enmarcado en el ámbito político y social de nuestro país.
De este modo, el doctor Pinilla inició su exposición mostrando las pautas de lo que debe ser el actuar de los ciudadanos para afrontar las dificultades que permitan darle una solución idónea a los conflictos que por años han golpeado a Colombia.
Luego de realizar la introducción al tema central, Nilson Pinilla advirtió sobre la importancia que tienen las universidades a la hora de formar profesionales, a los que debería reforzársele la ética profesional, para que dejen de pensar en el interés individual y se piense en el beneficio colectivo.
Así las cosas, rápidamente procedió a reflexionar y analizar algunos sucesos de actualidad colombiana como los procesos de paz con los grupos al margen de la ley, dejando ver su malestar sobre el trámite que se les ha dado a los mismos y la impunidad que está a flor de piel en nuestro país.
"No podemos hablar de ética cuando se asesina, se secuestra y se extorsiona a otra persona. La paz no es firmar un papel, la paz debe esta soportada en el arrepentimiento y una verdadera reparación a las víctimas", indicó el catedrático de varias universidades.
Acto seguido, el doctor Pinilla pasó al paredón a los políticos de nuestro país, señalando que algunos de ellos son unos zánganos que sólo buscan lucrarse y no el beneficio de las comunidades que confían en ellos al darles su voto.
"La gran mayoría de ciudadanos somos unos pusilánimes, al reelegir a los mismos políticos a cambio de favores y puestos en diferentes entidades" agregó.
Según el ex presidente de la Corte Constitucional, las Asambleas departamentales no sirven para nada, el dinero que se gasta en el pago de estos políticos tendría un mejor uso al destinarlo a la educación o la salud de los ciudadanos. De igual forma deberíamos tener un congreso con menos políticos pero mucho más efeciente.
En cuanto a los órganos de control como la Contraloría General de la República y la Procuraduría General de la Nación, señaló que no pueden convertirse en un fortín político que sirva para proyectar hojas de vida para mejores cargos.
"Deben ser verdaderos entes de control sobre el gasto público y no unos dividendos adicionales al momento de repartir el botín" puntualizó.
Los colombianos somos los responsables de que los tramposos sigan accediendo a los cargos públicos, que finalmente son heredados a las esposas y sus hijos para enquistarse en el poder y tapar los actos de corrupción.
En este orden de ideas, los cargos de procurador, contralor o fiscal General de la Nación, deberían basarse netamente en la meritocracia y no tener la participación de ternas en las que los políticos de turno puedan meter la mano para elegir al funcionario que mejor les convenga.
Al consultársele sobre el denominado 'Cartel de la Toga', el doctor Pinilla manifestó que era un tema que le generaba vergüenza. "Prefiero que me llamen hp o humilde pensionado y no ex magistrado porque el tema ha sido peyorizado por algunos corruptos que llegaron a las cortes".
De igual forma, la varilla también alcanzó para el tolimense y exfiscal General de la Nación, Eduardo Montealegre, señalando que vio la Fiscalía como un trampolín para llegar a otros cargos públicos; como quien dice lo tildó de oportunista.
Finalmente, el doctor Nilson Pinilla, se refirió al caso del ex presidente Álvaro Uribe Vélez, señalando que la juez 30 de garantías de la ciudad de Bogotá cumplió con su deber por encima de las críticas que muchos realizaron.
"Un juez no puede estar permeado por la presión de los medios de comunicación u otros actores de la sociedad".
Finalmente, el invitado a esta conferencia de la Universidad de Ibagué, insistió en la importancia de la ética pública para corregir el rumbo de nuestro país y ubicar en los cargos de gran importancia nacional a personas capacitadas y que busquen el beneficio colectivo y no únicamente el individual.