Debido a los diferentes inconvenientes en el abastecimiento de agua potable que existe en la ciudad de Ibagué y por la emergencia de fluido eléctrico externo al hospital, se hizo necesaria la utilización permanente de la planta eléctrica para cumplir con las necesidades del centro asistencial.

De este modo, el hospital Federico Lleras Acosta tuvo que adoptar un plan de contingencia para minimizar los consumos de los dos servicios públicos vitales para el desarrollo de las actividades del personal.

De este modo, para atender la dificultad, la administración del hospital decidió tomar las siguientes medidas de forma provisional:

1. Restricción de visitantes: desde portería se limita el acceso a visitas y solo se permitirá el ingreso a los que ciudadanos que consideren necesarios para acompañar o dar asistencia a los pacientes de manera transitoria o permanente. 

Así mismo se retoman los medios de llamado telefónico o video llamadas para brindar información a los familiares, para tener una comunicación fluida con los médicos.

2. Restricción de ingreso y acceso a estudiantes de escuelas, visitadores médicos, personal administrativo no esencial y que pueda realizar labor de TELETRABAJO, asegurando que ningún area asistencial se afecte por ausencia de personal administrativo. 

3. Agilidad en los tramites de salida de los pacientes cuando se de orden del medico tratante.

4. Gestión en la entrada de carro tanques de apoyo al suministro de agua potable.

5. Apoyo de planta eléctrica con suministro de combustible permanente para fluido eléctrico constante en el hospital.

Vale la pena señalar que según el informe entregado por las directivas, este plan de contingencia no afecta la prestación del servicio médico a los pacientes que se encuentran hospitalizados, ni a los que vayan a acudier al servicios de urgencias.