En un contundente anuncio tras culminar un Consejo de Seguridad con la Fuerza Pública, la alcaldesa Johana Aranda informó sobre la implementación de medidas drásticas para enfrentar la creciente delincuencia en la ciudad. Entre las principales determinaciones se encuentra la militarización de varios puntos críticos de Ibagué.

"Después de analizar los homicidios ocurridos en la ciudad en los últimos días, hemos decidido que tanto la Policía como el Ejército hagan presencia con sus fuerzas especiales en las zonas de mayor afectación", indicó la mandataria. Este análisis reveló que todas las víctimas tenían antecedentes judiciales, principalmente por hurto, microtráfico y lesiones personales, lo que sugiere un posible "ajuste de cuentas".

Además de la militarización, la alcaldesa Aranda destacó la articulación de diversas autoridades judiciales, incluyendo la Sijin, la Seccional de Inteligencia Policial y el Gaula, para avanzar en las investigaciones y combatir eficazmente los delitos.

Entre las conclusiones del Consejo de Seguridad se encuentra también la publicación de un cartel con los delincuentes más buscados y la activación de recompensas para quienes ofrezcan información que conduzca a la captura de los responsables.

Para reforzar la operatividad, se incrementarán las visitas de control en los barrios con mayor índice de delincuencia, desplegando unidades de Fuerzas Especiales Urbanas y unidades motorizadas del Ejército.

Estas medidas representan una respuesta firme de la administración municipal ante la situación de inseguridad que afecta a Ibagué, buscando garantizar la seguridad y tranquilidad de sus habitantes.