El factor Gómez Gallo en las elecciones del Tolima
Ya los liberales, apoyados por el ex senador Mauricio Jaramillo Martínez y por el también ex senador Alberto Santofimio Botero, escogieron como candidato a la Gobernación desde noviembre del año pasado a Luis Carlos Delgado Peñón. Delgado fue el perdedor de las elecciones pasadas, pero ahora ha sido el primero en iniciar campaña y ya varios lo están dando como el ganador.
Por eso, tanto los conservadores -divididos en las facciones de Gómez Gallo y del actual Gobernador, Óscar Barreto-, como los de Cambio Radical y la U, están buscando la forma de posicionarse.
Gómez Gallo cuenta con ser liberado y lanzarse como el candidato conservador a la Gobernación, mientras que Barreto espera lograr que alguien cercano a su círculo se quede con el aval conservador y La U, guiada por Carlos García (exonerado por la Corte Suprema en el escándalo de la parapolítica) y Cambio Radical, liderado por los hermanos Martínez, buscan posibles alianzas para quedarse con parte del poder burocrático.
Pero los pactos que se han hecho -tanto a la Gobernación, como a la Alcaldía- hasta el momento son débiles y las alianzas que se consoliden dependen en gran parte de cómo se mueva Gómez Gallo.
El barón encarcelado
Gómez Gallo fue capturado en diciembre de 2007 mientras ejercía su cuarto período consecutivo como senador, después de que la Corte Suprema de Justicia determinara que había suficientes evidencias para vincularlo con Eduardo Restrepo Victoria, alias “El Socio”, un narcotraficante que financiaba al Bloque Tolima de las AUC y se aprovechaba de su protección. Hoy, "El Socio" está en una cárcel de Estados Unidos, a donde fue extraditado.
Gómez Gallo renunció al Congreso y su proceso pasó a la Fiscalía. En agosto de 2008, el entonces Fiscal Delegado ante la Corte Suprema, Julio César Martínez, decidió precluir el proceso y liberar a Gómez Gallo al ver que algunos testigos se contradecían. Pero la Corte ordenó en enero de 2010 que Gómez Gallo fuera recapturado y Martínez investigado.
Antes de ser capturado por primera vez, Gómez Gallo era uno de los barones electorales más fuertes del Tolima. Entre él, Carlos García de La U y el liberal Mauricio Jaramillo se repartían prácticamente todos los municipios del departamento. Pero con su captura su poder comenzó a entrar en declive y las bases y las cuotas del partido conservador comenzaron a migrar hacia Óscar Barreto, el actual gobernador.
Gómez Gallo, sin embargo, estaba confiado en que pronto quedaría libre y entre sus planes estaba lanzarse a la Gobernación para reconquistar su poder político. Pero el lunes, la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia decidió negarle la libertad que él reclamaba aduciendo vencimiento de términos.
El argumento de la Corte, de que faltan pruebas y testimonios por recaudar en Estados Unidos, no le da mucha esperanza.
De todas maneras Gómez Gallo sigue creyendo que pronto saldrá libre. Por una parte, Carlos García -el líder tolimense de la U-, que fue encarcelado entre julio de 2009 y septiembre de 2010 por sus supuestos vínculos con el Bloque Tolima, fue absuelto por la Corte que consideró que los testimonios no eran suficientes y algunos testigos se contradecían. Los mismos testigos claves en el juicio de García son los que han hablado en el proceso de Gómez Gallo, por lo que el senador vislumbra una esperanza.
Por otra parte, con la evidencia de compra de testigos en el caso del exsenador Luis Alberto Gil, la Corte podrían llamar de nuevo a testigos en casos de retractación. El caso de Gómez Gallo podría ser uno de los afectados.
le dijo que, debido a un supuesto soborno, ampliaría el testimonio de algunos testigos y escucharía nuevos.
Si bien se puede lanzar o recurrir a algún candidato de confianza mientras sigue preso, de lo que hay certeza en el Tolima es que Gómez Gallo ya se está moviendo para truncar otras candidaturas y fortalecer sus alianzas.
Pero sobre todo para frenar a los “barretistas” a quienes respaldó en las elecciones de octubre de 2007 pero que buscaron quedarse con el poder después de su encarcelamiento. Y para ello quiere quedarse con la candidatura del partido conservador.
Gómez Gallo, el renegado
El gobernador Barreto ha intentado atraer a una coalición a Gómez Gallo, pero él no se ha dejado. El año pasado, en un acto de "protocolo", Barreto fue a visitarlo a la cárcel para preguntarle quién debería reemplazar en la Secretaría de Desarrollo Físico a Alejandro Martínez, que renunció para aspirar a la Alcaldía de Melgar. Gómez Gallo sugirió a una de sus fichas, Carlos Hernando Enciso quien, a pesar de la oposición inicial de Barreto, hoy ocupa el cargo.
Aún así, Gómez Gallo mantiene su distancia de Barreto, pues confía en que llegará su libertad y no quiere adherir a ninguna campaña, sino tener una propia.
Ya el partido conservador ha intentado -y fracasado- nominar dos candidatos a la Gobernación a los que Gómez Gallo, a su vez, ha intentado torpedear. El primero fue Mauricio Pinto, que fue el Secretario General de Barreto en la Gobernación y que contaba con el apoyo del Gobernador y de la maquinaria del “Barretismo”. Durante su período en libertad, Gómez Gallo criticó fuertemente la gestión de Barreto y de Pinto, que ya comenzaba a perfilarse como candidato, acusándolos de abusar de su poder en varias intervenciones públicas y artículos de prensa.
Pero no fue Gómez Gallo, sino la Procuraduría, quien terminó tumbando a Pinto, pues lo destituyó e inhabilitó por 10 años por participación indebida en política. Lo sancionaron porque hizo proselitismo en una manifestación de apoyo al ahora representante de La U Carlos Edward Osorio, al ahora representante conservador Alfredo Bocanegra y al entonces candidato a la Cámara por el partido Conservador Javier Ramiro Devia. Todos ellos cercanos al Barretismo y al senador Juan Mario Laserna.
Cuando se conoció esta noticia, varios políticos pasaron por La Picota, buscando ser ungidos como candidatos por Gómez Gallo. Pero él no quiso avalar a ninguno, todavía confiado en su propia candidatura y, a finales del año pasado, la coalición barretista proclamó un nuevo candidato. En una reunión del 31 de diciembre entre Laserna, Bocanegra, el destituido Pinto y Jaime Barreto, el hermano del gobernador que representa al sector de La U -pues fue el gerente de la campaña de Santos en el Tolima-, eligieron como nuevo candidato a Jaime Eduardo Reyes.
Reyes, que había sido Secretario Agrícola de Barreto, y que antes había sido concejal y diputado de la Asamblea de la línea de Gómez Gallo, parecía un candidato que mediaría entre ambas líneas y lograría atraer tanto a los gomezgallistas, como a los barretistas. De hecho, Gómez Gallo llegó a respaldarlo públicamente desde La Picota. Pero Reyes decidió renunciar a través de un mensaje de Facebook, dejando desconcertados a los conservadores. Según algunos, los barretistas quisieron imponerle a Pinto y a Jaime Barreto en la campaña; pero según otros, fue el mismo Gómez Gallo quien habría impulsado su renuncia (Reyes había dicho que renunciaría si Gómez Gallo salía libre y se lo pedía). De donde sea que haya venido la presión, lo cierto es que los conservadores se quedaba nuevamente sin candidato.
Sin embargo, en el primer taller democrático de Uribe, realizado en Bogotá, el expresidente lanzó el nombre de Luis Fernando Caicedo Lince, que fue gerente del ICA en su gobierno y que había sido gerente del Fondo Ganadero del Tolima. Caicedo Lince anunció su candidatura en una rueda de prensa en la que quedó claro que contaba con el apoyo de los empresarios uribistas de la región, así como de Andrés Felipe Arias -que lo nombró en el ICA- y del Presidente del Partido de La U, Juan Lozano que quiere que su Secretario General en el Ministerio de Ambiente, Ricardo Ferro, sea apoyado como el candidato a la Alcaldía por La U.
Pero algunos dicen que Caicedo tiene pocas posibilidades pues ha tenido escasa visibilidad política y su única base son los ganaderos. Aun así, cuenta con los votos que le pueda endosar la popularidad del expresidente Uribe y con el apoyo del senador huilense Hernán Andrade. Barreto se considera “el gobernador más uribista del país, pero algunos conservadores ven a Caicedo demasiado uribista y temen que termine entregándole las cuotas burocráticas a personas cercanas al uribismo que no necesariamente sean conservadores.
Por eso, en una reunión entre los parlamentarios tolimenses conservadores de la región y el directorio departamental, se decidió que se abriría una consulta para definir al candidato. En ella podrían participar otros tres candidatos que quieren heredar el poder de Gómez Gallo: José Édgar Bonilla (que fue Director de Cortolima gracias al apoyo del exsenador), José Darío Ramírez (que fue Director Regional de Fiscalías en el Tolima y en Quindío) y Álvaro Montoya García (que fue Director de Arco, una entidad empresarial bajo la influencia de Gómez Gallo).
Pero ahí no terminarán las pujas, puesto que también hay que acordar los pactos de la coalición.
La telaraña de alianzas
Puesto que la candidatura liberal por ahora es la más fuerte, los demás partidos han buscado alianzas para quedarse con el poder político. La U ya acordó con los conservadores que ellos irían por la Alcaldía, mientras que apoyarían a los azules en la gobernación. Cambio Radical -que, junto a los conservadores y la U, conforman la coalición que eligió al gobernador actual-, también haría parte de esa coalición, siempre y cuando Germán Vargas Lleras, el líder del partido, no se fusione con el Partido Liberal, como parece ser el plan. Los líderes de Cambio en el Tolima, los hermanos Emilio y Rosmery Martínez, están a la espera de las órdenes de arriba. Y, si bien Cambio Radical no es una fuerza indetenible en el Tolima, su adherencia a la coalición podría inclinar la balanza a su favor.
Pero ni Carlos García, ni Pompilio Avendaño, ambos excongresistas y de la U, han descartado una posible candidatura, bien sea dentro de la coalición, o por fuera; y los Martínez no han podido expresar su apoyo, así que las candidaturas de este lado todavía están débiles y todo podría cambiar si Gómez Gallo logra salir de prisión, o decide apoyar públicamente a alguno de los candidatos.