Celsia pondrá en operación el primer sistema de baterías conectado a una granja de energía solar
En las próximas semanas, comenzará a operar en Colombia el primer sistema de almacenamiento de energía solar con baterías de litio, hierro y fosfato (LFP). Este avance marca un hito en la transición energética de Celsia, permitiendo contar con energía limpia y renovable durante la noche, cuando las plantas solares no generan energía.
Este sistema, con una capacidad de 2 MWh, funcionará en la granja Celsia Solar Palmira 2, convirtiéndose en el primer proyecto de energía renovable no convencional en Colombia con almacenamiento. Acumulará energía excedente para suministrarla al usuario final o al Sistema Interconectado Nacional (SIN) durante la noche.
“Esto es un sueño hecho realidad. Los equipos de innovación y negocios de Celsia han estado experimentando con diferentes tecnologías para implementar sistemas de almacenamiento, superando así la intermitencia de la planta solar. Ahora podemos duplicar la capacidad de generación de nuestras plantas fotovoltaicas y suplir hasta el 50% de energía en algunas empresas. Esta innovación nos ayuda a diversificar nuestra matriz energética y reducir la dependencia de la generación hídrica, que es vulnerable a fenómenos climáticos como El Niño”, afirmó Ricardo Sierra, líder de Celsia.
El almacenamiento con baterías ofrece beneficios, como aumentar la oferta de energía sin necesidad de nuevas redes y permitir la instalación de mayores capacidades de granjas solares. Estas baterías optimizan el autoconsumo, reducen la dependencia de la red y generan ahorros a largo plazo. Además, mejoran la flexibilidad y calidad de la energía solar, desplazan la generación a horas nocturnas, y pueden servir como respaldo en cortes de energía. También aportan a la estabilización de la red y su instalación es similar a la de proyectos de energía solar.
¿Cómo será el sistema de almacenamiento de energía?
Este sistema de almacenamiento, basado en la tecnología BESS (Battery Energy Storage System), está alojado en un contenedor de 20 pies de ancho y 28 toneladas, que alberga más de 120 packs de batería. Es un sistema autónomo que incluye un gestor de control automático, así como sistemas de monitoreo para garantizar la seguridad operativa y de mitigación ante emergencias.
Las baterías son de litio, hierro y fosfato (LFP), y de acuerdo con su uso podrían tener una vida útil de 15 a 20 años. Ya en Colombia se avanza en soluciones innovadoras para su reuso y reciclaje, cuando terminen su vida útil.