Chuck Grassley y Marco Rubio son dos senadores republicanos de Estados Unidos, los cuales están preocupados por algunas políticas y propuestas tomadas por parte de Gustavo Petro desde que asumió el poder, ya que creen que la política anti droga que esta llevando el nuevo Gobierno no es la mejor para la región.

Otro de los temas tratados por los funcionarios estadounidenses en la carta enviada a la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas da la Casa Blanca es la reactivación de las relaciones entre Colombia y Venezuela, lo que ellos llaman el “narco-régimen” de Nicolás Maduro.

“La política de drogas y la postura del presidente Petro hacia EE.UU. es alarmante. Poco después de asumir el cargo, el presidente Petro suspendió las órdenes de arresto y de extradiciones de miembros del Ejército de Liberación Nacional (ELN), una organización terrorista designada por EE.UU. con aproximadamente 3.000 miembros activos”: se puede leer en la carta. 

En la carta también dijeron: “El presidente Petro ahora busca renegociar la alianza de Colombia con los Estados Unidos, que tanto él como el presidente Biden menospreciaron por carecer de equidad. En su reunión, el presidente Petro solicitó una reforma en los procedimientos de extradición de larga data de nuestros países”

Por ahora existe esta preocupación, pero todo indica que las relaciones entre el presidente Gustavo Petro con el presidente Joe Biden están en buenos términos, algo positivo para los planes a futuro que tiene el Gobierno Nacional.