Los condones usados por los deportistas colapsaron las cañerías de la Villa Olímpica
Por el temor al contagio masivo de enfermedades, además del riesgo que representa el Zika para los embarazos, las autoridades brasileñas establecieron más de 300 repartidores de condones en la Villa Olímpica durante la realización de los Juegos de Río de Janeiro.
Fueron en total 450 mil los preservativos que se destinaron como medida de precaución, lo que produjo el colapso de las cañerías del centro deportivo, situación que se suma a la captada por las cámaras de la BBC cuando dos deportistas fueron sorprendidos teniendo relaciones sexuales en la playa.
Al parecer los deportistas se encargaron de aprovechar muy bien su tiempo libre, tal y como acontenció en los Juegos Panamericanos de 2007 cuando la delegación argentina acabó con el sistema de aguas negras del edificio donde se hospedaba.