El derecho de no pedir
La verdad me fue imposible acceder, se mencionan informes financieros hasta el año 2016, pero imposible abrirlos para visualizarlos. A lo mejor están y no pude o no supe acceder a ellos.
De igual manera aparece en esta página el reporte trimestral de la ejecución presupuestal de las cámaras de comercio. Lamentablemente tampoco pude acceder a la información, pero constatando que cualquier persona puede conocer y tomar dicha información sin restricción alguna.
Por tal motivo decidí enviar al Presidente Ejecutivo de la Cámara, Luis Alfredo Huertas Pontón, derecho de petición, donde le solicité: 1) Información viajes y destinos de los directivos vigencia 2017-2018, con nombres y costos respectivos. 2) Ejecución presupuestal de dicho rubro. Expliqué en el escrito el interés que me animaba a pedir dicha información, que no es otro que el de conocer cómo han impactado a la comunidad empresarial dichos viajes y cómo se han replicado o socializado con la comunidad empresarial de la jurisdicción de la Cámara.
Con radicado 001-018-24387 del 16 de noviembre/18, la Cámara de Comercio dio respuesta negativa a mi solicitud, bajos los argumentos de: Naturaleza privada de la institución, derecho a la intimidad de la información, documentos de carácter privado que sólo excepcionalmente se pueden exhibir. La entidad sólo entregaría información sobre el manejo de los recursos derivados de su función pública, es decir el registro mercantil.
Pues está muy equivocado Luís Alfredo Huertas, porque la información que solicité en el derecho de petición es pública y así se demuestra en la página de la Superintendencia de Industria y Comercio y porque los gastos y ejecución a los que me refiero, no se financian con actividades gremiales u otras, no señores, se financia con los recaudos del registro mercantil, es decir de la actividad pública encomendada. Bien se habían podido ahorrar el tiempo del abogado(a) que redactó la respuesta y el papel donde se explayaron con argumentos peregrinos y sentencias de la corte que no aplican para éste caso específico.
Cuál es el miedo o el nerviosismo a entregar esta información, cuándo dicha solicitud proviene de alguien que conforma según ustedes, el selecto grupo de afiliados, y lleva 30 años ejerciendo la actividad empresarial, como socia de empresa familiar y ahora como independiente.
Quedo preocupada por la poca diligencia y negativa de la entidad cameral, porque en otras circunstancias, y con un Presidente Ejecutivo desprevenido y dispuesto a demostrar la transparencia de su gestión, no tendría inconvenientes en responder positivamente a cada una de mis solicitudes, sin necesidad de escudarse en la ley, la constitución y la jurisprudencia, para explicar porque no atiende un requerimiento, que con ética, sana lógica, sentido común y transparencia debe responder.
La Junta Directiva como máximo órgano de Administración, conforme rezan sus estatutos, debe prestar especial atención a estos asuntos, porque es ella quien revisa y conoce el presupuesto de la entidad, para la posterior aprobación de la Superintendencia de Industria y Comercio.
Por esto es que quiero llegar a la Cámara de Comercio, hay personas que deben rotar y cosas que tienen que cambiar. Mientras tanto y ante la negativa de la Cámara de Comercio, solicitaré la información a la Superintendencia de Industria y Comercio.
Tania Sierra.