Los colombianos pueden desde ayer adquirir su licor de aguardiente favorito en cualquier región del país luego de que la Corte Constitucional sentenciara la  inconstitucionalidad del artículo 28 de la Ley 1816 de 2016 o Ley de Licores.

Este fallo considerado histórico permite que los licores producidos por la empresas departamentales en todo el país, sin que medien permisos o licencias para hacerlo.

De esta forma se elimina el monopolio que los departamentos tenían sobre el comercio de estos licores.

La demanda fue interpuesta por el ex superintendente de Industria y Comercio, Pablo Felipe Robledo, quien aseguró que ahora, los consumidores en cualquier lugar del territorio colombiano podrán decidir, por sí mismos, el aguardiente que quieran consumir; el gobernador ya no podrá imponerles u obligar a consumir solo el aguardiente local.

Igualmente los ingresos por impuestos por el  consumo de aguardiente aumentarán para los departamentos a raíz de un aumento en la oferta y aque se podrá conseguir el favorito de cada persona en todas las regiones del país. 

El proceso se inició por la prohibición de Cundinamarca de la venta del Aguardiente Amarillo de Manzanares, que produce la Licorera de Caldas, gracias al fallo se puede conseguir desde ya en en el deparyamentol y el Distrito Capital, así como todas las regiones del país.