El próximo viernes 12 de abril se cumplirá una nueva celebración del Día del Orgullo Tolimense.  La jornada iniciará en el parque Manuel Murillo Toro con una Alborada Tolimense con bandas papayeras y terminará en el salón Alberto Castilla del Conservatorio del Tolima, con la exaltación a siete empresas Orgullo Tolimense.

En esta oportunidad, se rendirá homenaje a la alcaldesa de Ibagué, Johana Aranda y a la gobernadora del Tolima, Adriana Magali Matiz y el reconocimiento toda una vida a la directora de la caja de compensación familiar Comfenalco Tolima, Diana Lucía Reyes. Conozca aquí el perfil de las homenajeadas.

Adriana Magali Matiz, una mujer hecha a pulso

Abogada, especialista en Derecho Administrativo y Ciencias Constitucionales y también especialista en Derecho Tributario y Aduanero. Magíster en Gobierno Municipal de la Universidad Externado.

Su vida laboral la inició al ganar un concurso de méritos en la Contraloría del Tolima, cuando apenas estaba terminando el pregrado en Derecho. Allí comenzó como profesional universitaria y fue ascendiendo, lo que me permitió adquirir una gran experiencia en el ejercicio del control fiscal. Fue Jefe del Grupo de Jurisdicción Coactiva, Jefe de División de Juicios Fiscales, Jefe de División de Cuentas Municipales y Directora de Responsabilidad Fiscal.

Luego, como Contralora de Ibagué, logró la certificación en calidad. Ese organismo de control fue pionero en implementar el sistema electrónico de rendición de cuentas.

Posteriormente, como gerente de INFIbagué, trabajó para mejorar la calidad de vida en la ciudad, centrando esfuerzos en áreas como el alumbrado público, parques y zonas verdes.

Más adelante, Adriana Magali Matiz asumió el desafío como secretaria de Inclusión Social del Tolima, liderando programas integrales para todas las edades, generando entornos seguros y oportunidades educativas y laborales.

Allí tuvo experiencias maravillosas como darle la oportunidad a 3.140 jóvenes de estudiar en diferentes universidades de Ibagué, pagados por la Gobernación del Tolima. “Esta fue una experiencia maravillosa que me permitió transformar vidas, algo enriquecedor para mí no solo en el campo profesional, sino también y sobre todo, en lo personal”, asegura.

Luego fue elegida Representante a Cámara, avalada por el Partido Conservador y obtuvo la mayor votación. Su labor legislativa se centró en promover la equidad de género y los derechos humanos, además de impulsar proyectos para el desarrollo del Tolima, en áreas como infraestructura vial, salud y agropecuaria.

Hizo control político y tramitó la presentación de proyectos de ley, pero fue más allá. Gracias al trabajo en equipo, consiguió que el gobierno nacional dejara en el presupuesto 500 mil millones de pesos para las vías de los campesinos colombianos.

Consiguió apoyo en el campo deportivo para niños y jóvenes tolimenses con los Centros de Gestión Ciudadana que se hicieron en Rovira, Santa Isabel y Saldaña, y con los centros Sacúdete en Ibagué, Ortega y Ataco.

En salud, hizo un trabajo articulado con la Gobernación del Tolima, el hospital María Auxiliadora en Rioblanco, en el Centro de Salud del corregimiento de Santiago Pérez en Ataco. También en la ampliación del Hospital Granja Integral de Lérida con la unidad integral de Pacientes Agudos, que está en trámite y también un tema supremamente importante que fue la consecución de la Unidad Diagnóstica de la Mujer y la adquisición del acelerador lineal por parte del hospital Federico Lleras Acosta para atender a pacientes diagnosticados con cáncer, obtenido con recursos conseguidos gracias a la gestión ante el Ministerio de Salud.

Igualmente, se destaca una gran gestión en obras trascendentales e importantes como el corredor vial del sur del Tolima, con el que consiguió recursos para la vía Chaparral – El Limón – Rioblanco y para la vía Ataco – Planadas.

Con Celsia, gestionó a través de la modalidad de Obras por impuestos, $17 mil millones para la vía Coyaima – Ataco y también algunas placa-huellas y alcantarillado gestionadas a través del programa Colombia Rural del Ministerio de Transporte, obras que, sin duda alguna, llevaron al beneficio de las comunidades.

En Ibagué, trabajó por obras como el Coliseo Mayor para el que, en bancada, consiguió 25 mil millones de pesos. También impulsó el Sistema Estratégico de Transporte Público.

Hizo gestiones en temas de migración y trabajó en el proyecto de la vía Orinoquía – Pacífico. Además, sacó adelante proyectos de cafeteros; de Ciencia, Tecnología e Innovación, así como consolidar alianzas productivas para el sector agropecuario.

Con 24 años de experiencia en el sector público, hoy es la Gobernadora del Tolima para el periodo 2024 – 2027, cargo que ha asumido con toda la responsabilidad y sabiendo que durante toda su vida ha adquirido el conocimiento, las herramientas y la capacidad para liderar los destinos del departamento, trabajando en innovación en el sector agropecuario, en el ámbito social por la defensa del agua y de la vida, dándole un nuevo aire a los emprendedores, avanzando por la seguridad y por el componente social que hoy la lleva a afirmar que, tomando en cuenta las necesidades que tienen los tolimenses, es muy importante construir vías, pero más importante aún, es construir vidas y eso es lo que está haciendo desde la Gobernación.

“Caminaremos juntos en búsqueda de un Tolima en paz, con progreso y desarrollo. Unidos hacemos más y con los pies en el territorio seguiremos avanzando en esta tarea, construyendo un panorama incluyente y social. Que sepan los tolimenses que tienen una gobernadora que no es de escritorio sino de territorio”, concluye.

Johana Ximena Aranda Rivera, una figura nueva en la escena política tolimense

Tuvieron que pasar 23 años para que nuevamente una mujer asumiera el liderazgo de la Ciudad Musical de Colombia. 

Pasó su niñez entre las hermosas montañas del Cañón del Combeima, recorriendo los pasillos de la escuela de Pastales, donde sus padres eran profesores. 

Desde muy joven salió de su ciudad en busca de oportunidades. Estudió bacteriología en la Universidad Católica de Manizales. Trabajó por más de 20 años en el Ibal, lideró la puesta en marcha de la primera planta de tratamiento de aguas residuales y fue docente e investigadora de la Universidad Cooperativa de Colombia.

Enfrentó un cáncer mientras estaba embarazada de su hija Isabella, pero ganó la batalla y la pudo traer al mundo, dio luz a una hermosa vida y se convirtió en madre. Su familia es el motor más fuerte que la motiva a seguir adelante. 

Su esposo Juan Arturo; sus hijos Isabella y Sebastián, su madre Marina y su padre Dionisio, y sus hermanos Lucy, Alexander y Carlos, son su soporte, su apoyo, la inspiración que llena su vida para lograr sus sueños y no darse por vencida. 

El mayor de sus honores fue haber sido Secretaria de Salud de Ibagué, en medio de la crisis sanitaria más difícil de la historia. Se enfrentó cara a cara con la muerte, trabajó sin descanso en cada rincón de la ciudad. 

Salvó a más de 100 mil vidas y gracias a ello, Ibagué fue la ciudad número uno en manejo de la pandemia, según el Ministerio de Salud. Dios la ha puesto a prueba muchas veces, la templó como el acero para servirle a la gente. 

Sus banderas de gobierno girarán en torno a sacar adelante proyectos para combatir la inseguridad por medio de tecnología; la construcción del cable aéreo y el tranvía; mejoramiento de infraestructura vial y apoyo a los emprendedores para disminuir los índices de desempleo.