Base de la Fuerza Aérea en Melgar tiene un nuevo comandante
En las instalaciones de la base aérea de Melgar, el inspector general de la Fuerza Aérea, mayor general Rodrigo Alejandro Valencia, reconoció al señor coronel Robert Zambrano Lozano como nuevo comandante del Comando Aéreo de Combate No. 4, en una ceremonia que contó con la presencia de los comandantes de las unidades militares, de Policía, autoridades civiles y allegados a la base aérea.
Hay que señalar que el señor coronel Pedro Arnulfo Sánchez anterior comandante de la unidad, fue destinado al Comando Conjunto de Operaciones Aéreas en Bogotá; de tal forma al despedirse de su grupo de trabajo expresó la satisfacción de haber contado con un personal altamente calificado para poder cumplir con sus logros y retos durante este año.
Al asumir su cargo, el coronel Zambrano expresó su profundo orgullo y compromiso por estar sirviendo a la Nación como nuevo comandante de esta unidad; manifestando que trabajará con ahínco para continuar apuntando hacia los objetivos nacionales.
•Trayectoria: El Coronel Zambrano es profesional en administración de operaciones, especialista en establecer asociaciones y alianzas estratégicas, además trabajo como jefe seccional de recuperación de personal del centro nacional, en donde coordinó operaciones de rescate de personal herido en combate, operaciones de búsqueda y salvamento de aeronaves accidentadas o desaparecidas, operaciones de extinción de incendios y de ayuda humanitaria por desastres naturales; así mismo participó en el ejercicio de recuperación de personal más grande del mundo “ANGEL THUNDER” en Tucson Arizona en el 2011; adicional, también fue segundo comandante en el Grupo Aéreo del Casanare, liderando personal de oficiales, suboficiales y personal civil. Finalmente coordinó operaciones aéreas en contra del terrorismo, entre otras acciones que enriquecieron su hoja de vida.
Al finalizar la ceremonia, el nuevo comando de la unidad se dirigió al personal al asistente manifestando lo siguiente: “continuaremos luchando siendo dignos de los que murieron por la paz, para que tomemos de ellos la misma devoción a la causa por el cual dieron la suprema prueba de afecto a su nación. Además de expresarles el gran reto que tengo con la instrucción de la Escuela de Helicópteros de las Fuerzas Armadas, deberemos ser responsables y útiles en este futuro inmediato que nos depara tareas para que nuestros alumnos se preparen con habilidades y devoción, manteniendo el estatus de ser un referente hemisférico, como una escuela que cuenta con un formidable recurso humano inspirado por el mejoramiento continuo, la calidad y la disposición permanente para que podamos volar entrenar y combatir para vencer”.