Con el objetivo de optimizar la calidad del servicio a sus afiliados, reforzar su red de prestadores y estabilizar su situación financiera, EPS Sanitas puso en marcha un plan de choque durante los meses de febrero, marzo y abril de 2025. 

Esta estrategia busca consolidar y fortalecer las acciones emprendidas para garantizar la operatividad de la EPS, resolviendo en los próximos 90 días las dificultades que representan un riesgo para sus 5,8 millones de afiliados.

Las acciones contempladas en este plan están diseñadas para generar resultados medibles y de alto impacto, cumpliendo con las órdenes impartidas por la Superintendencia Nacional de Salud, que dieron origen a la medida de intervención en abril de 2024.

"Al cierre de 2024 culminamos el diagnóstico de la EPS. Este fue el punto de partida para formular medidas urgentes que nos permitirán evaluar y operativizar acciones con impacto en la salud de nuestros afiliados", señaló Kemer Ramírez Cárdenas, Agente Especial Interventor.

Fortalecimiento del servicio

Las estrategias formuladas para responder de manera más eficiente a las necesidades de los afiliados incluyen:

Mejora en el suministro de medicamentos: Se fortalecerá el modelo de diversificación de gestores farmacéuticos y se avanzará en la gestión directa con la industria para garantizar la provisión de medicamentos de alto costo.

Supervisión del acceso a tratamientos: Se reforzará el seguimiento a las reclamaciones y tiempos de respuesta relacionados con la entrega de medicamentos.

Evaluación y optimización de la red de prestadores: Se implementarán ajustes para asegurar una atención continua y segura en todas las regiones.

Atención prioritaria a grupos de riesgo: Se desarrollarán estrategias específicas para mejorar la salud de pacientes con enfermedades cardiovasculares, renales y VIH. 

Territorialización de la salud

Como parte de la estrategia, el Agente Interventor iniciará visitas regionales para evaluar la operación en el territorio, priorizando las zonas más dispersas y con mayores dificultades en el acceso a servicios. A través del trabajo con la red pública hospitalaria, se garantizará una atención integral, oportuna y de calidad para los afiliados en estas regiones.

Prácticas costo-eficientes

El plan también busca garantizar la sostenibilidad de la EPS mediante:

Optimización del recaudo y pago de obligaciones: Se fortalecerán acciones como la conciliación de cartera, la renegociación de contratos con descuentos y la implementación de incentivos por resultados.

Nuevas modalidades contractuales: Se avanzará en la migración a modelos de contratación más eficientes y en la liquidación de acuerdos pendientes.

Distribución eficiente de los recursos: El 92 % de los ingresos de la EPS se destinará al pago de obligaciones con la red prestadora, junto con una depuración de cuentas por pagar y un fortalecimiento del portafolio de inversiones.

Reducción del gasto administrativo: Se aplicará un ajuste del 1 % en el ahorro administrativo, que será redirigido al pago de servicios. 

Mitigación del riesgo legal

Para reducir el riesgo derivado de acciones de tutela, el plan de choque priorizará la optimización en la prestación de servicios, el transporte de pacientes y la entrega de medicamentos, asegurando que los tiempos de respuesta sean más ágiles y oportunos.

Durante los próximos 90 días, EPS Sanitas ejecutará este plan de choque con un seguimiento constante y la supervisión de la Superintendencia Nacional de Salud. Con estas acciones, la EPS reafirma su compromiso con la mejora continua de sus servicios, garantizando una atención integral y la sostenibilidad de su operación para el bienestar de sus afiliados.