El futuro de la Cámara de Comercio de Ibagué está lleno de retos y oportunidades que deben ser abordados con una visión estratégica y una fuerte capacidad de articulación entre los actores del ecosistema empresarial y cultural. Es esencial entender la articulación entre la cultura y el desarrollo económico, una conexión que ciudades como Medellín y Bogotá han sabido aprovechar eficazmente. La Cámara de Comercio de Ibagué tiene la capacidad de articular actores, invertir en el territorio y ser estratega en la identificación y priorización de procesos efectivos.

El nuevo líder o lideresa deberá enfocarse en los eslabones de la cadena de valor de las industrias culturales y creativas - Creación-Investigación-Formación, Producción-Edición, Distribución-Difusión-Comercio - para lograr un impacto sostenible y significativo. El concepto de cadena de valor, propuesto por Michael Porter, destaca la importancia de los clusters como estrategia para mejorar la competitividad. Un cluster eficiente permite el diálogo constructivo entre productores, proveedores, formadores, y entidades de gobierno, identificando necesidades y oportunidades comunes. Los clusters fomentan la innovación, incrementan la productividad y competitividad, y facilitan el acceso al crédito y a insumos especializados.

La Cámara de Comercio de Ibagué debe aprovechar estas ventajas para consolidar el cluster de la música y alinearse con la UNESCO como ciudad creativa de la música. Tal como señala Porter, el éxito de un cluster depende del sentido de dependencia mutua entre los actores, la libre circulación de información y la disposición para desarrollar agendas comunes. Esto permitirá disminuir las barreras de entrada al sector, mejorar el acceso al financiamiento y promover la generación de una demanda sofisticada que impulse el crecimiento de las empresas culturales.

Además, es crucial que la CCI continúe formulando proyectos y propuestas, aprovechando al máximo las convocatorias disponibles. Un equipo formulador competente puede evitar que se pierdan oportunidades valiosas, permitiendo que la ciudad se beneficie de diagnósticos claros y estrategias bien definidas. Esto incluye la necesidad de diagnósticos claros, como los proporcionados por un observatorio de cultura y turismo del departamento, que permitan identificar los cuellos de botella que enfrentan los emprendedores.

El reciente proceso de selección para la presidencia de la Cámara de Comercio de Ibagué, liderado por el Colegio de Estudios Superiores de Administración (CESA), culminó con la presentación de una terna de aspirantes que refleja no solo la calidad profesional de los candidatos, sino también un avance significativo hacia la igualdad de género en roles de liderazgo. Luisa Fernanda Melo, Alba Lucía García y Óscar Germán Díaz Enciso fueron los elegidos tras un riguroso proceso de evaluación, destacándose especialmente la inclusión de dos mujeres en la lista. Esta selección subraya el potencial transformador y la importancia de integrar una agenda de género en la dirección de esta importante institución.

El presidente saliente, Brian Bazin Bulla, ha dejado una huella positiva en la CCI. Durante su gestión, apoyó incondicionalmente las actividades de circulación de artistas y fortaleció el ecosistema cultural de Ibagué. Su enfoque colaborativo y su apertura al diálogo permitieron avanzar en proyectos que potenciaron el desarrollo cultural y económico de la ciudad. Como ex secretaria de cultura, puedo atestiguar su constante disposición a trabajar en equipo y su compromiso con los gestores y emprendedores culturales.

La elección del nuevo presidente o presidenta de la Cámara de Comercio de Ibagué es un proceso crucial que puede definir el futuro del desarrollo económico y cultural de la región. Con candidatos de la talla de Luisa Fernanda Melo, Alba Lucía García y Óscar Germán Díaz Enciso, la Junta Directiva tiene la responsabilidad de elegir a la persona más idónea, capaz de articular una visión estratégica que potencie el talento local y fomente un crecimiento sostenible e inclusivo. Este proceso, liderado con transparencia y calidad por el CESA, promete llevar a la Cámara de Comercio de Ibagué a nuevas alturas, consolidando su papel como un actor clave en la promoción del emprendimiento, la innovación y el desarrollo cultural de la región.