Pasar al contenido principal
Econoticias y Eventos
Opinión
COMPARTIR
Se ha copiado el vínculo

¡Basta ya de mentiras!

Apoyado en algunos medios de comunicación el Gobierno Nacional, utiliza un sinfín de estrategias comunicacionales para distraer a la opinión pública y desvirtuar lo que los valientes jóvenes reclaman en nombre de todos los colombianos. Por: Andrés Currea.
Imagen
Crédito
Ecos del Combeima
24 Mayo 2021 - 7:51 COT por Ecos del Combeima

La convulsión social que no cesa en nuestro país y que con el paso de los días se exacerba más, tiene como combustible las mentiras que ante la comunidad internacional dice constantemente el presidente Iván Duque. Por ejemplo, en una auto entrevista y en inglés, ha machacado la verdad y narra situaciones que no existenten, oculta la férrea represión de su gobierno y describe una Colombia, que solo está en su minúscula visión y que refleja su desconexión con la cruda realidad que vivimos todos en un país que galopa sin control.

Apoyado en algunos medios de comunicación el Gobierno Nacional, utiliza un sinfín de estrategias comunicacionales para distraer a la opinión pública y desvirtuar lo que los valientes jóvenes reclaman en nombre de todos los colombianos. No los bajan de vándalos, terroristas, delincuentes e incitadores, cuando la realidad es otra y los enfrentamientos son perpetrados por pequeños reductos y por infiltraciones de Estado, para desestabilizar las marchas y convertirlas en campos de batallas que a su vez son el escenario ideal para justificar las terribles violaciones a los derechos humanos.

Por fortuna y para contrarrestar lo anterior el ojo de las redes sociales desnuda la realidad y narra con detalle lo que ocurre en las calles. Los videos e imágenes son pruebas fehacientes de la brutalidad policial y de los heridos y muertos que dejan estos enfrentamientos urbanos de un lado y del otro. Del 100% de las personas que de manera espontánea y libre salen a las calles, hay que reconocer que un pequeño 5% comete los desmanes. Se estima que grupos de extrema izquierda, delincuencia común y agentes infiltrados del Estado, son los responsables de las batallas campales.

Y pese a todo, la verdad sale a flote y el primer mandatario no puede ocultar el sol con un dedo, no puede manipular a la comunidad internacional. Duque, ha perdido, bueno si es que alguna vez la ha tenido, toda la credibilidad, su discurso de odio, de no conciliación de repudio por los manifestantes es el reflejo inequívoco de una política de extrema derecha, que no permite que se reclame lo justo y que reprime con fuerza, con violencia y con terror. Razón por lo cual grandes medios de comunicación como The Washintong Post, que la semana anterior publicó un detallado análisis de la evidencia de video en cuatro casos de muertes de manifestantes, en el cual incluyeron el homicidio del joven ibaguereño Santiago Murillo, demuestra que hay excesos y que el presidente Iván Duque, miente ante la barbarie, de la cual nunca se ha referido y ha ignorado a los jóvenes muertos y a sus familias. 

Recuerdo como el presidente y su Gobierno, se rasgaban las vestiduras ante los desmanes en Venezuela, en los cuales la fuerza pública del vecino país aplastaba sin contemplaciones a los jóvenes que protestaban contra el régimen de Nicolás Maduro. Hoy nos pasa lo mismo, y no hay concierto, no hay despliegue de medios, no hay campañas, lo único que hay es silencio cómplice y mano extremadamente negra y dura contra quienes solamente reclaman lo justo en un país sin justicia social.

También te puede interesar estas columnas

El club deberá decidir si continuará siendo un engranaje más en la maquinaria del negocio del fútbol o si buscará retomar el camino de una identidad que conecte con su hinchada.

No obstante, las expectativas que tengamos sobre el nuevo año son directamente proporcionales a la realidad que tendrá el país.

Pareciera que la indolente percepción en seguridad castigara siempre las cifras en esta materia, y es por ello que cuando las cifras mejoran como en este caso y para este año, la percepción de seguridad se demora en hacerlo.

Por eso Dayro Moreno nunca estuvo acá, ni Daniel Bocanegra, ni otros tantos que crecieron aquí como Freddy Guarín.

La celebración de año nuevo marca el camino de la esperanza, anticipa buenos deseos, y nos anima a construir en positivo.

Adaptarse no es fácil: el clima frío, la inmensidad de la ciudad, su ritmo cosmopolita y hasta la forma de vestir marcan una transición desafiante. Sin embargo, a pesar de estos retos, me siento profundamente orgullosa de mis raíces ibaguereñas.

¡Lo volvió a hacer! El representante a la Cámara, Gerardo Yepes hace méritos para obtener el título de indisciplinado del año al interior del partido Conservador.

¿Cómo es posible que, a pesar de contar con presupuestos, políticas y documentos que advierten sobre la importancia de tomar medidas, aún no tengamos campañas bien estructuradas para reducir el consumo de agua?

Hemos sido engañados, por altos estamentos nacionales quienes desconocen y pretenden minimizar las grandes falencias de este “antisistema de salud” fundamentado sobre la intermediación financiera.