Los retos de la nueva Junta Directiva de la CCI
Con la elección de la nueva Junta Directiva, se espera que la dinámica misional de la Cámara de Comercio de Ibagué, se active y despliegue sus acciones de manera acertada en el corto y mediano plazo en favor de los comerciantes y empresarios de la ciudad.
Las pujas internas en la Cámara de Comercio de Ibagué, no deben convertirse en el palo en la rueda para el desarrollo de los objetivos rectores que la entidad debe liderar para generar progreso y atender las demandas de los comerciantes que reclaman atención, acompañamiento y ayuda en tiempos de crisis.
Los sectores involucrados en estas disputas, a veces normales en cuerpos colegiados, pero que no se deben descontrolar, tiene la obligación moral y legal de cesar las confrontaciones, quizás llevadas por otros intereses y no por la dinámica de la entidad, para destrabar muchas de las acciones que hoy reposan por falta de atención, planificación y voluntad. El trabajo no debe centrase en buscar la permanencia en la directiva ni en demostrar quien tiene más poder, pues estos egos deslegitiman todo tipo de representación y sentencia el camino a la repulsión por sus representados y la comunidad en general.
El primer reto es entonces que los comerciantes y empresarios aptos para votar lo hagan con total calidad, con la conciencia de elegir miembros de junta activos, con criterio propio, desprendidos de intereses personales, con visión clara de lo que debe ser el desarrollo de la ciudad y la capacidad de trabajar en equipo a pesar de las diferencias de pensamiento.
El segundo reto es trabajar sin descanso por los intereses generales, por los objetivos misionales de la entidad cameral y por acompañar a los gobiernos local y departamental en la construcción de dinámicas financieras que generen desarrollo económico y social.
El tercer reto para los nuevos miembros de junta es erradicar las diferencias que dividen y menguan el accionar eficiente de la entidad. Es establecer posiciones argumentadas y debatir sobre ellas y no sobre los factores de poder, que en nada le aportan al ejercicio por el cual fueron elegidos. Además de levantar la imagen de la Cámara de Comercio, que ante la opinión pública no es la mejor, y para ello se deben concentrar en trabajar unidos en la planificación correcta de las acciones en beneficio de los comerciantes, que, por ejemplo, esperan se realicen los procesos de financiación de programas de desarrollo empresarial contemplados en la ley 905 de 2004 articulo 23 y que debe ser de estricto cumplimiento con la utilización de dineros públicos de las acciones delegadas que asume la Cámara de Comercio.
Finalmente, el mensaje es el de elegir bien, de elegir nuevas caras con criterio, conocimiento y voluntad de trabajo desinteresado y si hay reelegidos que sea por sus positivas actuaciones, porque lo han hecho bien y no por poderes diferentes al servicio y al trabajo honesto por los comerciantes.